Intimidad. Algunas propuestas desde el Magisterio eclesiástico.

Cómo citar este capítulo: Ferrari, F., Gómez Quitián, J. C., & Nossa Ramos, D. C. (2022). Intimidad. Algunas propuestas desde el Magisterio eclesiástico. En Santa Cruz Vera, D. (comp.), Persona, creatividad y educación de la intimidad (pp. 13-30). Editorial Universidad Católica de Colombia. https://doi.org/10.14718/9786287554245.2022.1

Resumen

El tema de la intimidad personal puede abordarse desde varios puntos de vista y relacionarse con otros tópicos como son: la protección de datos personales; la vinculación de la intimidad con la tecnología; las excepciones, límites y consecuencias de la intimidad y su tratamiento en el campo jurídico, etc. 

Ahora bien, para continuar con esta línea, el presente trabajo busca analizar si el Magisterio eclesiástico, especialmente el del Papa Francisco, contempla el tema de la intimidad personal. Para responder a este interrogante, se realizó el estudio de cuatro documentos relevantes de este pontificado: la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe en la ciudad de Aparecida, Brasil (2007), en la que, para la época, Jorge Mario Bergoglio participó como Arzobispo de Buenos Aires; la Carta encíclica Lumen fidei (2013); la carta encíclica Laudato si’ (2015); y la carta encíclica Fratelli tutti (2020); estas tres últimas promulgadas cuando Francisco ya había sido elegido Pontífice. 

Del análisis de los mencionados documentos se pudo determinar que la intimidad sí se tuvo en cuenta en el Magterio eclesial en varios aspectos que se desarrollarán en el capítulo; por ejemplo, que el concepto de intimidad se presenta como indispensable para el encuentro con Dios mediante la oración personal. Además, que trasciende a la individualidad, toda vez que el trato personal e íntimo con Dios necesariamente da frutos, es fecundo y se abre al cuidado del prójimo y de la casa común. Por último, se puede destacar que la intimidad con Dios no es una actitud exclusiva de las personas consagradas, sino también de las familias católicas, que están llamadas a proteger y custodiar la intimidad del hogar de todo el ruido externo que les impida desarrollar su espiritualidad.