Conciencia actual de la Iglesia

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Conciencia actual de la Iglesia

Cuando se habla de conciencia actual se refiere a esa nueva conciencia eclesiológica, existente previamente, suscitada por el Espíritu Santo y garantizada por él. La novedad no radica en las ideas, sino en las acentuaciones distintas  de ella que se han ido elaborando en el pasado, olvidadas pero siempre poseídas reflexionadas una vez descubiertas, para cumplir su misión de descubrir a los hombres de todas las épocas a Cristo. 

La novedad de la constitución Lumen Gentium ha sido reflejar a la iglesia en su dimensión:

·      Cristológica

·      Pneumatológica

·      Sacramental

·      Escatológica

Presenta una síntesis al analizar estas dimensiones que ayudan al hombre de hoy  a encontrar respuestas  ya que se encuentra en un mundo radicalmente diferente a decenios anteriores, debido a la secularización, al pluralismo religioso, a fenómenos sociológicos que han cambiado las estructuras,  a  revoluciones como el comunismo, etc.

La dimensión cristológica explica que la Iglesia existe desde Cristo y en Cristo, no solo en el origen sino de perduración, porque ella refleja la luz de Cristo siendo su actitud de obediencia, su existencia es fidelidad y su vivir es revivirle a él

La dimensión penumatológica nos muestra que el Espíritu fue enviado por el Padre en Pentecostés para santificar a los creyente constituyéndoles en Iglesia. Lo mismo que el Espíritu es para la iglesia, los cristianos deben ser para el mundo: principio de información y vitalización.

La dimensión sacramental  es consecuencia de su dimensión cristocéntrica, existiendo un enraizamiento sacramental en el nuevo Pueblo de Dios, constituyéndolo en Cuerpo de Cristo y Templo del Espíritu. Sacramentos e Iglesia son realidades coextensivas. Esta nace de aquellos; aquellos nacen de esta. La eucaristía hace la iglesia y la iglesia hace la eucaristía.

La dimensión escatológica hace a la Iglesia esperar porque preve ya en fe y pregusta en caridad a quien posee y sabe presente. Es una esperanza de consumación y no de iniciación.

El cristiano de hoy  se siente iglesia;  es iglesia en construcción.