Confusión con la psicología positiva

Prieto-Ursúa, M. (2006). Psicología Positiva: una moda polémica Positive Psychology: a controversial fashion. Clínica y Salud, 17(3), 319-338.

Afirma que:
"Lo que distinguiría a la Psicología Positiva de “dudosos métodos de autoayuda o filosofías espirituales”, incluso lo que la diferencia de “las claras tendencias positivistas de la corriente humanista de la psicología”, es que la Psicología Positiva adopta el método de la psicología científica.
Sin embargo, la necesidad creciente de los defensores de la Psicología Positiva de repetir que no es un movimiento espiritual, ni un ejercicio de autoayuda, ni un método mágico para alcanzar la felicidad - también Seligman (2001) ha tenido que insistir en que “positive psychology is not just happyology”- parece estar reflejando que esta declaración de intenciones científicas puede no estar conseguida.
En ocasiones es difícil distinguir la Psicología Positiva de un movimiento espiritual".


Hay que estar atentos para distinguir esta ciencia científica con talleres realizados por personas sin titulación y sin preparación que irrumpen continuamente en nuestras vidas intentando vender felicidad o bienestar con métodos poco ortodoxos.